junio 15, 2021

Knemidocoptes spp. en guacamaya roja (Ara macao)

 Barrueta-Acevedo, F.M.


Introducción

Los knemidocoptes son ácaros de forma circular que afectan a diversas especies de aves. Los reservorios son muy escasos. K. mutans es el causante de las “patas sarnosas” o “patas elefantiásicas” de las gallinas, pavos y faisanes principamente, aunque también puede afectar psitácidas, paserinas y otros grupos de aves. K. laevis gallinae es el agente de la “sarna”; se localiza en los folículos de las plumas en gallináceas y palomas, principalmente, causando la llamada “sarna del pico”.

Ciclo de vida

Los ácaros de Knemidocoptes tienen un promedio de vida de aproximadamente tres semanas, las cuales pasan sobre su hospedero. Las hembras son vivíparos. Las lasrvas tienen tres pares de patas; después de dos etapas de ninfa, los ácaros se convertirán en adultos, que tienen cuatro pares de patas. Los ácaros hacen su madriguera en el folículos de las plumas y en el estrato córneo, principalmente en la cara, los pies y la rinoteca, donde se alimentan de queratina. Por lo general, se ven afectadas las regiones sin plumas (pico, párpados, patas, barbas). A medida que se reproducen los ácaros, van formando túneles en la madriguera, produciendo una seria destrucción del tejido afectado.

Lesiones

Cuando se encuentran afectadas las extremidades inferiores, las lesiones asientan sobre todo en los tarsos y cara dorsal de los dedos, donde inicialmente se reduce exudación mezclada con detritus celulares hasta dar lugar a costras gruesas, que llegan a dificultar la locomoción. Las aves picotean las zonas parasitadas a causa del prurito. Cuando se afecta la cara (principalmente en psitácidas), se observa degradación del estrato córneo de la rinoteca como principal signo, dando la característica forma de “panal de abeja”. En ambos casos, puede haber intensa arteritis local y el proceso también puede repercutir sobre el bazo, hígado, riñones (glomerulonefritis), corazón y pulmones. La reproducción se ve afectada al disminuir o anularse la puesta.

Diagnóstico

El diagnóstico de estas acariosis implica la demostración de los ácaros, mediante disolución de las costras y otro material en solución de potasa al 10%, en caliente. También pueden observarse mediante raspados directos, tomados con una solución de aceite-ivermectina.

Tratamiento

Son eficaces los tratamientos con piretroides, bromociclenos, organofosforados, etc., pero lo más recomendable es la ivermectina (200mcg/KgPV), ya sea tópica o inyectable, repetida a la semana o a las dos semanas. Para facilitar la actuación de los acaricidas, conviene eliminar previamente las costras, especialmente en las patas. Para la sarna de las plumas pueden bañarse las aves en suspensiones acuosas de acaricidas. Se debe aislar y tratar a todas las aves con lesiones y cualquier tipo de aves que han tenido contacto directo con aves sintomáticas.

La moxidectina inyectable también es eficaz. En un estudio, uno o dos tratamientos tópicos a intervalos de 10 días sobre la piel del cuello en periquitos australianos fue eficaz y no mostró efectos adversos en las aves.El prurito desaparecía en los primeros 10 días post-tratamiento, mientras que la resolución completa de las lesiones tardaba unos 30 a 40 días, dependiendo de la severidad de las lesiones.

Se debe evitar el uso de antiparasitarios tópicos como la rotenona, ortofenilfenol, crotamitón y el lindano, que pueden ser más tóxicos que eficaces. En las plumas, la aplicación de aceite mineral a las lesiones ha sido eficaz, pero es complicada y puede resultar en efectos secundarios, incluyendo plumas aceitosas y la aspiración del aceite mineral. A pesar de que la selamectina es eficaz para el tratamiento de los ácaros del oído (Otodectes especies) y la sarna sarcóptica en las especies de mamíferos, no ha sido evaluada en las aves y no se recomienda actulamente para su uso en estas especies.

Gestión complementaria

Algunas terapias adyuvantes incluyen capas de ablandamiento con sustancias solubles en agua, emolientes no tóxicos, como el gel de aloe vera, teniendo cuidado de no tapar los orificios nasales. Si los orificios nasales se ocluyen con costras, estas deben removerse cuidadosamente para restaurar el flujo de aire normal. Uso moderado de ungüentos tópicos oftálmicos con antibióticos en y alrededor de los ojos puede ser necesario en casos graves, pero se debe evitar el contacto con las plumas. Las aves con heridas abiertas pueden beneficiarse de la administración simultánea de antibióticos sistémicos y medicamentos anti-inflamatorios no esteroideos. Si está indicado, la dieta del ave debe ser mejorada y la vitamina A suplementaria podría ser beneficial.

Caso clínico
Se describe el caso de un ejemplar de guacamaya roja (Ara macao) que es reportado por lesión degenerativa en el pico, refiriendo que convive con otro ejemplar de la misma especie y otro tipo de aves, como pericas australianas y anseriformes. Destaca la adquisición reciente de dos patos introducidos sin cuarentena previa, quienes se encuentran en contacto directo con el ejemplar afectado. Al examen físico puede observarse degradación rápida progresiva de la rinoteca, llegando a un diagnóstico presuntivo de acariasis, procediendo de manera simultánea a tratamiento provisional y toma de muestras para confirmación diagnóstica, mediante raspado con una mezcla de ivermectina y aceite mineral.
Rinoteca severamente lesionada. Guacamaya roja
Detalle de la rinoteca. Guacamaya roja

El otro ejemplar de guacamaya roja comienza con lesión similar incipiente, por lo que se administra solamente tratamiento tópico. Posterior a la administración de ivermectina tópica, se produce prurito intenso en el área lesionada, lo que refuerza el diagnóstico presuntivo. Al microscopio pueden observarse ácaros correspondientes a la morfología deKnemidocoptes spp. Se administran dos dosis de ivermectina subcutánea con un intervalo de dos semanas, con lo que se observa notable mejoría y se deja al ejemplar bajo observación. El animal se encuentra completamente recuperado a las seis semanas de iniciado el tratamiento.

Guacamaya roja. Seis semanas post-tratamiento

Guacamaya roja. Detalle de rinoteca, posterior a tratamiento